Blog de Raúl García

domingo 20 / 11 / 2022

Su objetivo es, sin duda, sembrar suficientes dudas como para retrasar la acción climática real, contribuyendo a la inacción política y a la desaparición de las políticas mitigación frente al cambio climático. De esta manera Díaz Ayuso niega el trabajo realizado durante décadas sobre la conexión entre nuestra utilización de combustibles fósiles y el cambio climático, tal y como han venido demostrando diferentes informes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC).


Negacionistas climáticos

Negacionistas climáticos

[Foto: https://www.climatica.lamarea.com/wp-content/uploads/2019/09/2negacionismo-vs-ciencia.jpg]

Si comparamos la situación actual con hace un par de décadas, hay señales claras en de que el negacionismo climático ha perdido fuelle. Por ejemplo, las evidencias que se manifestaron durante este verano hacen cada vez más difícil sostener las opiniones negacionistas.
Pero los intereses de un sector de la industria basada en los combustibles fósiles no pueden permitir que la opinión pública se alinee con los informes y trabajos de la comunidad científica. Así que intentan utilizar a líderes políticos con el fin de que emitan opiniones que contribuyan a difundir la desinformación climática destinada a socavar la ciencia y las soluciones para abordar este problema. Un caso bastante claro es el de Díaz Ayuso o el de los dirigentes de Vox. Recientemente Díaz Ayuso afirmó que desde que la Tierra existe” ha habido cambio climático, y que la izquierda no puede “seguir contra la evidencia científica porque tienen en su cabeza el comunismo” para impulsar una agenda de reformas que, “en algunas ocasiones es una gran estafa” y “empobrece cada vez más a más ciudadanos”.
¿Qué pretende con estas afirmaciones? Su objetivo es, sin duda, sembrar suficientes dudas como para retrasar la acción climática real, contribuyendo a la inacción política y a la desaparición de las políticas mitigación frente al cambio climático. De esta manera Díaz Ayuso niega el trabajo realizado durante décadas sobre la conexión entre nuestra utilización de combustibles fósiles y el cambio climático, tal y como han venido demostrando diferentes informes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC).
Lo que hacen Díaz Ayuso y los dirigentes de Vox es difundir deliberadamente mentiras con la intención de engañar, distorsionar y afirmar que es producto de una conspiración comunista para obstaculizar cualquier acción climática significativa, al haber una división al respecto en la sociedad.
Nos queda un camino importante por recorrer. Los líderes de Vox y una parte nada desdeñable del PP han decidido iniciar una guerra cultural contra las políticas para reducir los impactos del calentamiento global. Eso nos deja a nosotros, los seres humanos que usamos la razón y las evidencias, frente a la tarea de separar los hechos de la ficción. Debemos plantar cara a los mercaderes de la desinformación, aunque no lo tenemos fácil. La polarización y el desacuerdo que dominan las redes sociales no ayudan mucho. No hay tiempo que perder y no vale esconder la cabeza. Nos estamos jugando el futuro del planeta.